El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, ha discutido la reciente aprobación de la reforma al sistema registral y notarial, la cual introduce cambios significativos en el funcionamiento de las notarías en todo el país. En una entrevista con Radio Pauta, el secretario de Estado destacó que el avance de esta ley representa “una gran noticia para el país”, subrayando que “tiene efectos muy concretos”.
Cambios en la atención al público
Gajardo explicó que la nueva legislación establece de manera clara los requisitos que deben cumplir las notarías para la atención al público. En este sentido, mencionó que se abordarán aspectos como horarios de atención, tarifas claras, así como los requisitos de infraestructura y conectividad.
El ministro también hizo hincapié en la importancia del soporte digital que deberán tener las notarías, lo que incluye la transmisión de datos y la creación de repositorios que permitirán a los ciudadanos obtener copias digitales de los trámites realizados sin necesidad de acudir físicamente a las notarías. Gajardo afirmó: “Se termina con los horarios y precios distintos entre notarías. Se va a uniformar eso y se va a entregar una prestación clara al servicio”.
Nuevos mecanismos de nombramiento
Uno de los aspectos más relevantes de la reforma es el cambio en el sistema de nombramientos de notarios y archiveros conservadores. Gajardo indicó que este sistema se transformará completamente, estableciendo un nuevo mecanismo de Alta Dirección Pública.
El ministro explicó que, a través de concursos públicos transparentes y concursos de oposición, las personas interesadas deberán competir para obtener el cargo de notario o archivero conservador. Gajardo afirmó: “A través de concursos públicos transparentes, concursos de oposición, de conocimientos, las personas van a tener que concursar para llegar a ser notario o archivero conservador”.
Críticas a la reforma
En relación a las críticas formuladas por el exministro Hernán Larraín sobre la norma, especialmente en lo que respecta a la inclusión de figuras como los fedatarios, Gajardo expresó que esto podría “enredar” el sistema. Según el ministro, el sistema notarial actual es beneficioso porque “disminuye la litigiosidad”, y la introducción de nuevas figuras provenientes de un derecho extranjero podría alterar su funcionamiento.
Respecto a la tramitación de la reforma, que se extendió por más de seis años, Gajardo mencionó que “los notarios en general fueron reticentes por una cuestión obvia, le están cambiando mucho de los aspectos vinculados con el funcionamiento”.
El ministro también señaló que los notarios objetaron aspectos como el nombramiento por Alta Dirección Pública y la fijación de aranceles. Sin embargo, la ley avanzó, lo que resultará en “mucha más regulación, y por cierto, menos poder” para los notarios.
Gajardo concluyó afirmando que “lo que hace esta reforma es entregarle más transparencia al sistema”, y destacó que “ningún familiar que tenga parentesco cercano de senador, diputado, ministro, subsecretario, o un alto cargo del Poder Judicial, va a poder ser notario y archivero conservador. Y tampoco van a poder contratar a sus familiares”.