Una encuesta realizada por la empresa de reclutamiento especializado Robert Half reveló que los problemas asociados a una mala gestión al interior de las organizaciones están entre las principales razones que interfieren en la productividad de los trabajadores.
Según el sondeo, realizado a profesionales de empresas de diversos rubros, cuyas posiciones van desde analistas y coordinadores o supervisores, hasta gerentes y directores y ejecutivos C-Level, cinco factores destacan entre las respuestas. La falta de claridad en las metas y objetivos (51%), el exceso de reuniones o comunicaciones innecesarias (49%), y los problemas de comunicación interna (46%), lideran las preferencias.
Además, un ambiente de trabajo estresante u hostil y la sobrecarga de tareas y plazos cortos (36%), respectivamente, cierran la lista de los factores más votados.
“Los resultados apuntan a tres variables comunes a la hora de analizar los resultados. La eficiencia organizacional, la comunicación y el clima laboral”, dijo el director asociado de Robert Half Chile, Caio Arnaes.
A juicio del ejecutivo, en cualquier escenario estos factores son una amenaza para la productividad, más aún cuando se viven momentos de mayor incertidumbre económica. Con relación a los factores ligados a la eficiencia de la organización, el ideal es apuntar a situaciones donde los objetivos estén claramente definidos, que los trabajadores sepan qué debe hacer cada quien. Que las reuniones no se excedan en tiempo y las cargas de trabajo sean las adecuadas.
En materia de comunicación, el ideal es que ésta sea clara, tanto en la convivencia del día a día como en las instrucciones y situaciones relacionadas con los aspectos del desarrollo del trabajo individual y colectivo. Y con relación al ambiente laboral, la tarea es lograr que se forme un clima agradable, que permita que los trabajadores estén a gusto y cuenten con todo lo necesario para realizar su trabajo de la mejor manera posible.
Sin embargo, Arnaes ve estos resultados como una enorme oportunidad. “Más allá de quedarse en una lectura negativa, las empresas tienen en ellos indicadores concretos para mejorar en esos aspectos y obtener grandes dividendos. En la medida que se hacen cargo de sus deficiencias, identificándolas y buscando corregirlas, se pueden revertir y generar una mejor gestión, clima y comunicación. Y eso implica mejores condiciones para los trabajadores y una mayor productividad”, concluyó.