La selección argentina logró una victoria contundente sobre Brasil con un marcador de 4-1 en el estadio Monumental, un evento que sigue generando reacciones, especialmente la confesión de Wesley, un joven lateral derecho brasileño que fue titular en ese encuentro. A pesar de la ausencia de Lionel Messi debido a una lesión muscular en el aductor izquierdo, el equipo dirigido por Scaloni mostró un rendimiento que, según el propio Wesley, dejó a los brasileños sin respuestas. “Ellos estaban todos eran Messi. No teníamos nada para hacer, eso”, relató Wesley al analizar la actuación de Argentina frente a su equipo.
“Fue un aprendizaje. Pienso que todo el mundo juega para ganar. Nosotros sabemos la calidad de Argentina. Fuimos allá a jugar, lo intentamos y nos esforzamos”, reconoció el futbolista de 22 años, quien recientemente fue transferido de Flamengo a Roma por más de 29 millones de dólares, en un diálogo con TNT Sports.
Es importante recordar que el desarrollo de aquel encuentro tuvo particularidades relevantes: la Albiceleste se impuso a las ausencias de figuras como Lisandro Martínez y Lautaro Martínez. Además, el segundo gol del elenco nacional, convertido por Enzo Fernández, incluyó una secuencia de 34 toques que comenzó en los pies de Nicolás Otamendi. Los otros tantos fueron obra de Julián Álvarez, Alexis Mac Allister y Giuliano Simeone. En redes sociales, la cuenta oficial de la selección compartió un video dedicado a la victoria, reforzando el impacto emocional de la goleada.
Previo al partido, el brasileño Raphinha había hecho un comentario que tomó notoriedad en relación al resultado: “Sí, les daremos una paliza, no hay dudas. Iremos con todo, dentro y fuera del campo, tiene que ser así”, afirmó Romario. El encuentro generó una contundencia en el campo que reflejó el contexto de la rivalidad entre ambas selecciones. La magnitud de la derrota llevó a la destitución de Dorival Júnior de su cargo como entrenador, quien aseguró que la caída no alteró la clasificación rumbo al próximo certamen internacional. “Gracias a Dios ya estamos clasificados para la Copa del Mundo. Esto acabó porque perdimos”, agregó Wesley.
Actualmente, Wesley comparte vestuario con Paulo Dybala y Matías Soulé. Tras debutar en la Serie A ante Bologna, el defensor considera que la derrota marcó un antes y un después para la selección brasileña. “Ahora podemos ver el aprendizaje. Llevamos poco tiempo de trabajo (con Carlo Ancelotti), pero percibimos mucha voluntad. Estamos mostrando en el campo lo que queremos, eso es muy importante”, explicó, convencido de que ha evolucionado desde aquella derrota ante Argentina, que fue seguida por una victoria de 2-1 contra Colombia, donde solo disputó 11 minutos. Posteriormente, volvió a la acción hasta el 5 de septiembre, cuando derrotó de manera categórica a Chile por 3-0.